martes, 5 de julio de 2011

Gallo Lolo descubre el "Propeller Island", hotel para gente no aburrida

Hola amig@s!

Hoy os presento un hotel en Berlín, tiene 45 habitaciones, una más rara que la otra, creadas por el artista berlinés Lars Stroschen, que al parecer disparó su vena más alocada para decorar cada uno de los ambientes.


Los diferentes elementos del hotel: los materiales, los colores, los objetos, no tienen una función decorativa, sino que integran la obra de arte habitable que es este hotel. Los muebles han sido todos realizados a mano. Las habitaciones están equipadas con un sistema de sonido que permite experimentar sensaciones auditivas que modifican el ambiente.
No existen dos habitaciones iguales, la habitación minimalista, la habitación caleidoscopio, dormir en una cama voladora, en un sarcófago, en una cama colgante o en una celda de prisión, todo es posible en este hotel. Incluso, una de las habitaciones más locas está al revés, o sea, tiene la cama en el techo.


Este hotel tiene "un manual de instrucciones":
  • No tiene recepción, sólo una oficina abierta de 8 a 12hs para atender la llegada y salida de huéspedes.
  • Al momento de la reserva, se solicita que el pasajero indique 3 habitaciones en las que le gustaría pernoctar, en orden de prioridad, pues es bastante probable que la que más desea no esté disponible.
  • En la página web del hotel hallarás un link para reservar debajo de la fotografía de cada habitación, es la única manera de saber qué es lo que estás reservando.
  • ¿Deseas conocer otras habitaciones? Te cobrarán 25€ de recargo por cada cambio de habitación.
  • Vanguardia no significa precio, por lo que algunas habitaciones muy “artísticas” no cuentan con baño privado y resultan las más económicas.
  • El hotel no ofrece estacionamiento, pero te aseguran que hallarás lugar para estacionar tu automóvil en los alrededores.

Los fumadores deberán solicitar habitación con balcón. El precio de estas habitaciones rondan entre los 70 y los 180€, y no incluye el desayuno.


Os imagináis dormir en esta y verme reflejado por todas partes? jejeje, yo ya tengo claro que cuando mis mamis me lleven a Berlín, quiero dormir en este hotel. Eso si, mejor no hacerlo en la habitación con la cama suspendida, no sea que me caiga de ella...



Hasta pronto chic@s!

No hay comentarios:

Publicar un comentario